Estamos en plena primavera, esa época del año en que los días se alargan, las temperaturas van subiendo lentamente y nuestro ánimo mejor. Pronto, no nos acordaremos del invierno y de esos meses en los que nuestra piel sufre más de lo normal y se reseca cada vez que salimos a la calle por las bajas temperaturas. Aunque la primavera mejora todo nuestro organismo, estos cambios provocan grandes desequilibrios, muy perjudiciales en nuestra dermis. Por ello, cuidar nuestra piel en primavera es tan importante como en el resto del año con algunos de estos consejos:
- Hidratación diaria y exfoliación periódica: Tanto nuestro rostro como nuestro cuerpo necesitan una hidratación especial y específica durante todo el año. Beber agua durante todo el día, aplicarnos cremas de día y de noche… Esto hará que nuestro cutis sea más natural y tenga mayor elasticidad.
Igual de importante es limpiar nuestro rostro de impurezas cada cierto tiempo, mediante exfoliantes que eliminan las células muertas de la piel, alisando e iluminando la superficie del cutis. Recomendamos los peeling químicos, que también consiguen suavizar arrugas finas y eliminar manchas solares superficiales.
- Preparar nuestra piel para el sol: Los primeros rayos de sol no nos pueden pillar desprotegidos, por lo que es fundamental protegernos de sus efectos nocivos, ya que a la larga pueden ser muy perjudiciales con la aparición de manchas e imperfecciones. No debemos olvidar utilizar cremas solares que nos prevengan de la acción directa de los rayos ultravioleta. Elige la crema más adecuada a tu tipo de piel para evitar el exceso de grasa, o aquella que pueda resecarla.
- Olvida el estrés: No es nada beneficioso para el estado de nuestra piel. Tener demasiada carga puede provocar una pérdida de elasticidad en nuestro rostro, provocando la aparición de arrugas y surcos. Los masajes y los aceites especiales siempre vendrán bien, aplicándolos en la piel con movimientos circulares, potenciando además la capacidad regeneradora de la dermis.
- Realiza ejercicio de manera regular: De este modo, oxigenaremos el organismo y la piel. Al practicar algún deporte, nuestro sudor elimina toxinas que dañan la salud de nuestra piel.
Ahora sí, lo tenemos todo preparado para disfrutar de esta primavera como se merece: con una piel luminosa y una sonrisa radiante… ¿Te apuntas?
